La obsesión por una sonrisa perfecta, conocida como dismorfia dental, está está al orden del día, avisan los profesionales del sector odontológico. Se trata de un trastorno basado en una obsesión casi irracional con la apariencia de la boca. Tras dos años de pandemia por Covid, se observa un incremento de la demanda de estética dental, ahora que los tratamientos ortodóncicos son cada vez menos invasivos. Fomentada por las redes sociales, el teletrabajo y las videoconferencias, tiene en común la exposición en un primer plano del rostro y la boca.
No obstante, los profesionales de la salud bucodental subrayan que es importante diferenciar entre la dismorfia y una necesidad real estética. Son quienes deben establecer un buen diagnóstico e identificar en qué circunstancias una intervención es apropiada. Los odontólogos y protésicos suelen trabajar juntos en el análisis morfológico de las facciones y los volúmenes faciales para determinar los tratamientos de estética dental que más se ajustan en cada caso y con la que se puede lograr un resultado más natural.
Los tratamientos que más han incrementado
Según Los Institutos Odontológicos, con más de 30 clínicas en la Península, los tratamientos que más han incrementado en los últimos tiempos son:
- Los blanqueamientos y las carillas. El tabaquismo, el consumo de alcohol, bebidas azucaradas o carbonatadas y cítricos favorecen la erosión y están totalmente desaconsejados, ya que pueden afectar a la coloración de los dientes. En este caso el blanqueamiento o pequeños tratamientos cosméticos pueden mejorar el color dental. Cuando las manchas no desaparecen, se puede optar por la colocación de carillas. Son prótesis de porcelana, composite o disilicato de litio diseñados a medida y adheridas al diente manchado, desgastado o roto para así recuperar su forma original, tamaño y color.
- Tratamiento ortodóntico para alinear los dientes. El tratamiento consiste en alinear los dientes de manera correcta y definitiva. Requiere de aparatos fijos en todos los dientes llamados brackets que van desde los clásicos metálicos hasta un sistema de guardas llamado ortodoncia invisible, así como técnicas de colocación de las piezas por detrás de los dientes para verse más estéticos.
Cuando se requiere cirugía
- Implantología estética para reponer piezas dentales perdidas. Los dientes rotos o fracturados son otro de los motivos más habituales entre los que optan a una armonización dental.
- Diseño de sonrisa. Se trata de un proceso impreso en 3D en el que se diseñan de manera virtual los dientes perfectos para la cara de un paciente. Muchas veces el problema radica en el diastema –separación entre los dientes- o en la asimetría dental, sea por apiñamiento o por una posición asimétrica entre las piezas superiores e inferiores. Una de las razones por las que se apuesta por un diseño de sonrisa es el progresivo deterioro del esmalte dental. Además de que puede reducir el tamaño del diente, puede comportar hipersensibilidad y un mayor riesgo de roturas e infecciones.
- Tratamientos orientados a las encías. Se busca reducir la exposición de éstas. En este caso se aconseja un proceso quirúrgico que corrige la línea de la encía de modo que se muestre más el diente o, en su defecto, para que lo cubra, si hay un retroceso de la encía.